Arturo Illia nació el 28 de octubre de 1908 en Corrientes y a lo largo de la historia argentina ha sido considerado una de las figuras nacionales que promovió el desarrollismo.
Perteneció a la Unión Cívica Radical y ya presidente de la Nación en 1958, fue echado por sospecharse de su relación con Perón por la obtención de votos, liberación y juicios justos a peronistas.
Este gobierno estuvo sumamente controlado por la milicia argentina tannto que lo amenazaban con Golpes de Estado e incluso le provocaron seis pero estos fallaron. Sin embargo el 29 de marzo de 1962 no pudo enfrentarse a todos los pedidos por lo que se produjo un Golpe de Estado. Se lo llevaron las Fuerzas Armadas a la cárcel de la Isla Martín García. Una vez allí su secretario de Marina, Clement, por vía telefónica le dijo que oficialmente había sido destituido y que continuaría detenido (hasta 1963). Por el contrario, el Jefe de la Casa militar Brigadier Rodolfo Pío Oterolo obligó a que él proclamase su propia renuncia pero el expresó: "No renunciaré, no me suicidaré, no me iré del país".
El 7 de julio de 1963 hubo elecciones presidenciales por parte del pueblo. Aunque Illia solo recibió un tercio de apoyo (no el peronismo), este se concibió como el máximo representante del poder ejecutivo nacional.
Illia se caracterizó por respetar el Poder Judicial y las autonomías provinciales, la eliminación de la desocupación obrera, aprovechar todas las producciones estatales, anulaciones de petróleo con empresas extranjeras, mejoras tecnológicas en el agro, otrorgación de créditos a pequeños y medianos productores para asegurar el autoabastecimiento alimenticio, intensificación de la industria, mejorar la calidad social, fundamentar el radicalismo, reclamo de las Islas Malvinas y la Antártida y la formulación de las Fuerzas Armadas Argentina con ideología democrática.
Asunción de Illia
